Inhuman restos de sanarateco, inmigrante guatemalteco asesinado a golpes en New Jerse, EEUU

EL PROGRESO | Entre muestras de dolor, luto y consternación por la violenta y brutal muerte que le dieron a un inmigrante guatemalteco en las afueras de un bar el domingo 7 de julio en New Jersey, Estados Unidos, familiares y amigos le dieron sagrada sepultura a los restos de quien en vida era Ludwing Arnoldo Álvarez Marroquín, de 35 años.

En su tierra natal de donde era originario, en la Aldea El Nuevo Amatillo en el municipio de Sanarate, El Progreso, fueron inhumados en el panteón familiar, en donde sus padres, le dieron el último adiós.

“Estoy muy agradecida con Dios porque hemos podido traerlo, pero me quedo muy dolida y triste porque ya no lo volveré a ver y ya no podré abrazarlo”, dijo la madre del inmigrante guatemalteco que viajo hace 14 años a Estados Unidos para recuperar su familia y darles una mejor vida en ese país.

SUS RESTOS ARRIBARON A SU CASA

Después de 14 años de ver partir a su hijo a Estados Unidos en búsqueda de su esposa y de su hijo, una madre nunca se imaginó que lo volvería a ver, esta vez no para recibirlo con un abrazo y un beso, sino para darle sagrada sepultura.

Después de seis días de haber perdido la vida, tras recibir una fuerte golpiza en las afueras de un bar en la ciudad de Paterson, Nueva Jersey, Estados Unidos, los restos de Ludwing Arnoldo Álvarez Marroquín, de 35 años; arribaron este miércoles a su tierra natal en la Aldea Nuevo Amatillo del municipio de Sanarate, El Progreso.

La progenitora de Álvarez, nunca se imaginó que el volver a ver a su hijo, seria dentro de una caja para darle  sagrada sepultura, después de viajar a Estados Unidos en búsqueda de su familia.

“El me ayudaba mucho, me duele mucho que se me haya ido de esta manera pero si Dios así lo quiso ahora que se lo lleve a descansar, no quería ver a mi hijo dentro de una caja, lo que si sé, es que ya está en su casa y le voy a dar sagrada sepultura, no merecía morir de esa manera brutal”, dijo a Oriente News el señor Arturo Álvarez Morales, padre de Ludwing.

Sus familiares y amigos recibieron los restos de Ludwing y serán velados en donde hace 14 años, era su casa de habitación, en donde creció y estudio, y sera este jueves que le darán el último adiós a su cuerpo que seraa inhumado en el panteón familiar.

LO SUCEDIDO

Un trabajador de la construcción guatemalteco se encuentraba al filo de la muerte luego de que fuera blanco de una brutal golpiza frente a un bar en Paterson la madrugada del domingo 07 de Julio.

Según la familia, Ludwig Álvarez, de 35 años, estaba en estado crítico en la unidad de cuidados intensivos del Saint Joseph’s Hospital. El ataque, captado por cámaras de seguridad, ocurrió en un bar ubicado en la Avenida 21.

Elsie Alvarado, sobrina de la víctima, dijo que su tío, a quien cariñosamente llaman “Ludín”, sufrió daño cerebral severo, además de que tenía la mandíbula rota.

Álvarez no contaba con seguro médico, sin embargo, pese al pronóstico de los médicos a quien le daban únicamente 24 horas de vida, no lo desconectaron hasta que su corazón dejo de latir.

“Llegó la trabajadora social, llevaron los documentos para ver si es elegible para el seguro ‘Charity Aid’, para tenerlo más tiempo conectado, porque sólo le daban 24 horas, pero como mi tía no ha firmado, no lo han desconectado”, comentó Alvarado.

El ataque ocurrió a eso de las 2:30 a.m. del domingo 07 de julio frente al establecimiento el “Tío Gozón”.

La Fiscalía del Condado de Passaic investiga el caso. La pesquisa indica que el trabajador fue golpeado por varios sujetos, que ya son buscados por las autoridades.

Un agente que patrullaba la zona encontró al inmigrante inconsciente en medio de un charco de sangre en la acera.

“Supuestamente fue por muchachas, porque ese bar es de muchachas, pero hay muchas versiones”, comentó Elsie.